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• En este 25 de noviembre, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, el Ministerio TIC presenta la campaña #SomosTodas con la cual hace su aporte para hacer de Internet un lugar seguro para las mujeres.
• A propósito de esta fecha, la psicóloga Annie de Acevedo hace importantes reflexiones.
• MinTIC con su programa Por TIC Mujer, busca empoderar a las mujeres y reducir los índices de violencia en el campo digital.

"La violencia contra la mujer es algo que se ha sostenido a través del tiempo", reconoce Annie de Acevedo, psicóloga colombiana quien lleva 36 años consolidándose como "la psicóloga colombiana más reconocida en temas de crianza y familia".

Cuando se habla de violencia hacia la mujer, en el imaginario colectivo aparecen golpes, gritos, empujones… sin embargo, el mundo digital no está exento de ser un escenario que pueda ser utilizado para tener un mal trato hacia la mujer. "Cualquier trato hacia la mujer que sea humillante, la va a poner en una situación de víctima y eso es lo que no queremos", asegura la experta.

De la misma manera, la doctora de Acevedo señala que cualquier mujer que se sienta agredida en redes, debe hacer un alto inmediatamente: "De una vez debe ponerse el tatequieto, decir: 'a mí no me gusta ese tipo de comunicación, me hace sentir mal…' ¡Algo! Uno tiene que ser claro sobre lo que quiere y no quiere, poner las reglas sobre cómo quiere comunicarse en los medios digitales con los demás".

La propia psicóloga comenta que hay personas que la han agredido en redes sociales por pensar u opinar de manera distinta a ellos. "Sobre todo hay hombres que han tratado de disminuirme (sic), de hacerme sentir menos. En esos casos, les respondo a esas personas y lo dejo ahí. Si la persona se pone más agresiva después de mi respuesta, lo bloqueo, porque ya me doy cuenta que es alguien con quien no voy a poder sostener ningún tipo de diálogo que conduzca a nada positivo".

Sobre los agresores digitales, la doctora de Acevedo explica que "no necesariamente son personas violentas también en el mundo físico, porque se esconden detrás de un nombre o un seudónimo para agredir de forma encubierta" Sin embargo, sin importar si la persona es agresiva en el plano físico o en el digital, es importante aconsejarle que busque ayuda profesional: "La persona que es muy agresiva puede tener un problema de control de impulsos agresivos y va a ser agresiva en las redes sociales y en la vida real, porque tiene un verdadero problema, son personas muy impulsivas y muchas de ellas no quieren recibir ayuda terapéutica, por lo que siguen sin poder manejar la agresión, no saben qué hacer con la rabia" explica.

La agresión en redes

Ante la presencia de comentarios hirientes, irrespetuosos o que rotulan de forma negativa, la doctora Annie de Acevedo recalca que "es muy importante para las mujeres no engancharse", hacer un alto en el camino y decidir qué tolera y qué no. "Es que uno no puede permitir una falta de respeto así sea en las redes. Uno debe procurar una buena convivencia así sea en el mundo digital".

De otra parte, sobre compartir la experiencia de ser víctima de agresión digital en redes, opina que "puede ocurrir que al hacerlo, la mujer se revictimice y no gane mucho. Si tiene que dar la pelea donde se quiere quitar el rótulo, es otro objetivo, contar la historia para que no pase más, para aconsejar, para dar información útil que empodere a otras mujeres y evitar que las historias se repitan".

Una mujer que es víctima de violencia digital va a resultar con su autoestima intelectual, emocional y social afectada, según lo explica la experta. "La mujer puede sentir que la dejaron en ridículo públicamente, la cantidad de sentimientos 'bajoneados' por el ataque, etcétera. Es una sensación que debemos quitarnos rápidamente, recordar quién soy yo, de qué estoy hecha, que la persona que me está agrediendo tiene un problema de inseguridad, está proyectando su propia debilidad y sus propios problemas sobre quien se deje".

En su recomendación final, la psicóloga Annie de Acevedo considera que "en esta época digital, las personas están compartiendo más de lo necesario, están compartiendo intimidades, situaciones privadas que deberían mantenerse así, privadas, porque de lo contrario, se exponen a ser criticadas. Debemos preguntarnos '¿hasta dónde quiero que los demás se enteren de mi vida privada?'".